El poder, la corrupción y las mentiras están en el corazón de Paradox , el thriller de acción brutal y sangriento del director de Ip Man , Wilson Yip, que (quizá) redondea la trilogía extremadamente floja de policías y ladrones que comenzó con SPL en 2005 y entregó a Cheang Pou- Soi (aquí un productor) para SPL 2: A Time for Consequences en 2015. Reuniéndose con el legendario actor y coreógrafo de acción Sammo Hung, el alter ego Louis Koo (tan bronceado e impecablemente coiffado como siempre) y la acrobática estrella tailandesa de artes marciales Tony Jaa, Wilson azota una acción eficientemente elegante que sabe dónde está su zona de confort y no se desvía de ella. Sorprendente tan a menudo como es convencional, Paradox fácilmente encontrará el mismo público que respondió a las dos primeras películas,
Al igual que las entradas anteriores, Paradox se dedica a las secuencias de lucha de huesos y el uso creativo de sus ubicaciones -en este caso, el lado más sombrío de Tailandia- así como cualquier cosa que Hung y el ágil reparto puedan conseguir. Esto puede incluir, pero no está limitado a, lavandería, plantas de interior, muebles de patio y, por supuesto, fruta exótica (Tailandia después de todo). Las huellas dactilares de Hung están por todas partes paradoja , y bajo su guía magistral él y Yip han manejado el imposible: hacer mirada de Koo badass.
La historia comienza con Koo (en pleno modo de mierda, con lágrimas y temblores de labios), como el policía de Hong Kong, Lee Chung-Chi, que reflexiona sobre su adorable hija Wing-Chi, despertando por la mañana y recordando una vez que saltó a su cama Con una cámara de vídeo. Claramente, el desastre se cierne. Después de conocer a la ahora adolescente Wing-Chi (Hanna Chan) y su novio, la noticia de que "quiere mantener al bebé" no sale bien. La próxima vez que veamos Wing-Chi, es cuando está siendo secuestrada desde el muelle de Pattaya. Después de una llamada nerviosa de un amigo, Lee se dirige a Tailandia, donde se inscribe en la investigación sobre la desaparición de Wing-Chi. Lee trabaja el caso con los policías locales Chui Kit (Wu Yue, Historia de la Policía: Lockdown ),
Yip y la escritora Jill Leung ( Ip Man 3 ) hacen un trabajo tranquilo y casi silencioso de sentar las bases de la historia y lo que equivale a su mayor conspiración (naturalmente). Leung también hace buen uso de jugar con el tiempo para descubrir algunas de las indiscreciones de Lee (su reacción al embarazo de Wing es aún peor de lo que pensábamos), y cae en los pesados sin esfuerzo y sin interrumpir el impulso hacia adelante. Sabemos que el alcalde de Bangkok, su lacayo político, Cheng Hon-Sau (Gordon Lam, demostrando una vez más que es uno de los MVPs de la industria de Hong Kong), el violador Ban (Ken Low) y el estadounidense Sacha (por qué?), Chris Collins) - poseído de un suministro sin fin de sombreros de Panamá - todos jugarán un papel en el camino, por lo que no hay necesidad de obtener fantasía. También hay una prostituta con un corazón de oro (Jacky Cai) para una buena medida.
La narración está en gran medida al servicio de la acción, ya pesar de un tercer acto prolongado, Paradox se mueve a lo largo de un clip saludable, ralentizando sólo para dar Lee y Chui tiempo para conectar sobre su paternidad compartida y encontrar una búsqueda común de venganza. La idea al acecho de que los que tienen poder no da una pizca a los que no lo tienen -y lo aprovecharán para su beneficio- es subestimada, así como la corrupción sistémica que le da vida y nuestra falta de voluntad colectiva para confrontarla.
La cinematografía asegurada de Kenneth Tse cambia entre el blues fresco y los grises de acero, y el color urbano vibrante, dando las mejores secuencias - los botines que asaltan adentro durante el enfrentamiento final para proteger el statu quo, ciclomotor-persiguiendo la persecución del pie respirar, y perfectamente complementa Wong La frenética edición de Hoi durante los fisticuffs de un barrio cercano. Las cosas se ponen un poco fuera de control cerca del final, y no hace falta decir que no hay suficiente de Jaa, pero Wu y Koo hacen impresiones respetables: la búsqueda final de Koo por Sacha, donde claramente no está de humor para los juegos, es un placer vicario. Un cuarto SPL sería bienvenido.
Compañía productora: Aether Film Production, Películas de Sun Entertainment, Bona Film Group, Alibaba Pictures, Sunny Side Up (Never) Limited, Sil-Metropole Organización
Elenco: Louis Koo, Gordon Lam, Tony Jaa , Vicky Pansringarm , Hanna Chan, Jacky Cai, Michelle Saram
Director: Wilson Yip
Guionista: Jill Leung
Productoras: Paco Wong, Cheang Pou-Soi
Director ejecutivo: Alvin Chau, Alex Dong, Yu Dong, YongFu Yu Chen Yiqi
Director de fotografía: Kenneth Tse
Diseñador de producción: Mak Kwok-Keung
Vestuario: Karen Yip
Editor: Wong Hoi
Música: Ken Chan, Comfort Chan
Ventas del mundo: Bravos Pictures Limited
En cantonés y tailandés
100 minutos
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